Bailar de Manera Segura

Bailar puede pasar factura tanto al cuerpo como a la mente, y algunos bailarines pueden descubrir que se agotan al esforzarse demasiado e incluso pueden desilusionarse con la industria de las artes escénicas. Es importante cuidarse para trabajar lo mejor posible a lo largo de su carrera de baile, y esto se puede hacer de muchas maneras.

Escuche a su cuerpo para evitar lesiones, trabajando correctamente y no tomando atajos o engañándose a sí mismo con el entrenamiento y la preparación adecuados. A lo largo del entrenamiento de un bailarín, se hace un gran énfasis en la técnica correcta, la alineación y la ubicación, sin embargo, el desempeño profesional parece alentar los movimientos de "trampa" para que el público parezca más estéticamente agradable. Por lo tanto, los atajos pueden producir incluso lesiones graves, pero evítelo escuchando los dolores y molestias del cuerpo, independientemente de cuán leves sean.

Durante el entrenamiento en el estudio o el aprendizaje de coreografía para el escenario, no tenga miedo de hacer preguntas si hay algo de lo que no está seguro. Esta puede ser una metáfora particular utilizada para transmitir un mensaje a los bailarines o una corrección individual. Al mismo tiempo, es importante comprender los límites de su cuerpo y trabajar dentro de ellos para una carrera de baile larga y feliz. Puede sentir que tomar otra clase de técnica para aprender nuevas habilidades o aprender de un maestro diferente puede hacer maravillas para su entrenamiento, incluso si es por el hecho de que explican las correcciones de una manera ligeramente diferente. Estas diferentes perspectivas son importantes para ver tu entrenamiento y habilidad de manera objetiva.

Cuídate a ti mismo y a tu cuerpo, ya sea asegurándote de tener un descanso adecuado, el combustible adecuado en el tanque para que puedas bailar o hacer entrenamiento cruzado con otras técnicas y ejercicios físicos. Esto mantiene el cuerpo fuerte y capaz. Al igual que con todos los nuevos estilos de baile, presta atención a lo que estás haciendo y detente si experimentas molestias o dolor. No trabaje con una lesión: puede causar daños a largo plazo tanto al cuerpo como a la mente.